Eventos y tecnología: Sí, pero ¿para qué?

Llevamos años planteándonos cómo integrar la digitalización de la sociedad y el marketing en los eventos, tratando de encontrar (o crear) soluciones tecnológicas que nos permitan una mayor conexión entre dispositivos y contenidos y no sé si a veces confundimos el medio con el fin. De hecho, es tal carrera por la digitalización de los eventos que seguramente uno piense por el título de este artículo que pueda ser de 2008 o bien de un recién llegado.

Como ilustraba el anuncio de Ikea de estas Navidades pasadas, estamos dejando de tratarnos para escondernos detrás de un dispositivo; hay muchas ocasiones en las que nos giramos hacia las gradas de un evento nuestro y solamente atisbamos un frondoso bosque de reflejos luminosos de pantallas que después en el café, están más pendientes del networking virtual que del real. Y ante esta situación, muchos se empeñan (o nos empeñamos), en soplar para apagar el fuego.

La tecnología es claramente un medio. Y además, como tal, es algo neutro cuyo valor reside en el uso que nosotros hacemos de ella. Estamos equivocados si confundimos innovación con tecnología o si nos dedicamos a competir por ver quién es el que más elementos digitales integra en un proyecto.

La solución a qué grado de tecnologización es positivo para un evento ha de definirse en origen, en el mismo momento en el que se decide la sede o el formato de una reunión. El orden es siempre el mismo: unos objetivos nos llevan a un concepto y éste a una selección de medios que nos permiten desarrollarlo. Si el peso de los bits invierte (o pervierte), este orden, estaremos dejando de cumplir los objetivos de nuestros clientes, que es por lo que nos pagan.

Y ojo, que esto no es un alegato en contra de la tecnología, creo que nuestra trayectoria nos avala en este sentido. Solo pretendemos poner el foco sobre la enorme potencia que tiene hoy en día disponer de la oportunidad de mirarle a alguien a los ojos y transmitirle tu afecto, respeto y consideración. Y creemos que nuestra relevancia como sector está directamente relacionada a la potenciación de lo físico y a la generación de experiencias memorables que pongan la piel de gallina a nuestros invitados. Y esto, en definitiva, se conseguirá con unos medios o con otros porque lo que de verdad importa es otra cosa.

Posts anteriores